martes, 7 de julio de 2009

TORMENTAS



Un cuentito que viene al pelo en este tiempo de poda ...

Cuentan que un día un campesino pidió a Dios le permitiera mandar sobre la Naturaleza para que -según él - le rindieran mejor sus cosechas.

Entonces cuando el campesino quería lluvia ligera, así sucedía; cuando pedía sol, éste brillaba en su esplendor; si necesitaba más agua, llovía más regularmente; etc.
Pero cuando llegó el tiempo de la cosecha, su sorpresa y estupor fueron grandes porque resultó un total fracaso

Desconcertado y medio molesto le preguntó a Dios por qué salió así la cosa, si él había puesto los climas que creyó convenientes.

Pero Dios le contestó - "Tú pediste lo que quisiste, más no lo que de verdad convenía.
Nunca pediste tormentas, y éstas son muy necesarias para limpiar la siembra, ahuyentar aves y animales que la consuman, y purificarla de plagas que la destruyan..."

Así nos pasa, queremos que nuestra vida sea puro amor y dulzura, nada de problemas.
El optimista no es aquel que no ve las dificultades, sino aquel que no se asusta ante ellas, no se echa para atrás.
Por eso hace falta una verdadera tormenta en la vida de una persona, para hacerla comprender cuánto se ha preocupado por tonterías, por chubascos pasajeros.

LO IMPORTANTE NO ES HUIR DE LAS TORMENTAS, SINO TENER FE Y CONFIANZA EN QUE PRONTO PASARÁN Y NOS DEJARÁN ALGO BUENO EN NUESTRAS VIDAS.

Hay derrotas que tienen más dignidad que la victoria...
Una retirada a tiempo es en si una victoria...
El primer éxito no significa victoria y el primer fracaso no significa derrota.

Pregúntate si lo que estás haciendo hoy te acerca al lugar en el que quieres estar mañana.

Antes de poner una barrera en tu vida, recuerda lo que vas a dejar dentro y lo que quedará afuera.

Dios guarde tu camino.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Me ha encantado !!. Este tipo de " cuentitos " llega, en muchísimos casos, en el momento oportuno.
Gracias.
Ana

Anónimo dijo...

Ademas que si!!!Yo ya pasé varias tormentas y espero que esta que parece venir sepa afrontarla con la misma sino con mas valentia, pero sobre todo espero que pase y poder enfretenarte a lo que trae consigo con tranquilidad y aMOr!!
GRACIAS!!

Anónimo dijo...

Pues "me aplico el cuento" y me quedo con la clave: "Pregúntate si lo que estás haciendo hoy te acerca al lugar en el que quieres estar mañana".
Muchas gracias! Un beso,
Natalia.

mariano dijo...

Cuando llega la tormenta, mucho temple y muchísima paciencia: "nada me turbe, nada me espante, todo se pasa, Dios no se muda,la paciencia todo lo alcanza, quien a Dios tiene nada le falta, sólo Dios basta". Repetirlo muchas veces, a mí me sirve. Mi abrazo para todos y mi corazón también.